Periodista, comunicadora, caminante curiosa, enamorada de las personas y de mi pequeño país
Te proponemos una serie de actividades de campo y playa para que los más pequeños de la casa pasen unas horas tan divertidas como enriquecedoras.
L'Escala. Club Nàutic l'Escala. Arxiu Imatges PTCBG
Las familias con niños pequeños a menudo se encuentran ante la duda: ¿qué hacemos con los más pequeños para que el viaje sea divertido también para ellos? Si llegáis a la Costa Brava con esta pregunta, aquí encontraréis cinco posibles respuestas.
En un país bañado por el mar Mediterráneo, los clubes náuticos tienen un programa deportivo amplio y generoso que cubre muchas franjas de edad. Sea cual sea la población de la Costa Brava en la que os alojéis, visitadlos con vuestros hijos y pedid información. Solo por poner un par de ejemplos, en el Club Nàutic Sant Feliu de Guíxols encontraréis cursos infantiles de vela ligera, windsurf o kayak y, en el Club Nàutic L’Escala, incluso hay un paquete familiar para que sea toda la familia la que aprenda kayak, paddle surf, vela de crucero o vela ligera. Y, ya puestos a recomendar, también podéis apuntaros a realizar una salida para practicar ecosnorkel en las islas Medes… y disfrutar de un extraordinario fondo marino.
Parc Natural del Cap de Creus. Oscar Rodbag. Arxiu Imatges PTCBG
Tierra adentro, también podemos elegir y hacer de payés o pastor es una opción que, además de entretenida, contribuye a hacer que nuestros pequeños valoren el trabajo de este colectivo. ¡Quién sabe si, incluso, despierta alguna vocación! Podéis probarlo en Mas Casas Cruïlles, una granja familiar sostenible que tiene la misión de producir alimentos sanos y naturales y que tiene las puertas abiertas durante todo el año. Hay visitas guiadas donde explican la importancia de la tierra, cómo se cuida un rebaño de ovejas y por qué son una buena receta contra la crisis climática. Si creéis que a vuestros hijos les gustará realizar un taller de lana y aprender las propiedades, los beneficios y los usos de esta fibra natural, local y sostenible este es, también, el lugar al que llevarlos.
Volvamos al mar para animaros a dar un paseo por una reserva natural única: el Parque Natural del Cap de Creus. ¿De qué manera? Siguiendo a pie una ruta circular de casi 5 kilómetros y ninguna dificultad técnica con inicio y final en el collado del Canadell. Los más pequeños comprobarán con sus propios ojos cómo la fuerza de ese viento que a menudo citamos los adultos, la famosa tramontana, esculpe con ansia piedras y rocas. Y seguro que también harán volar la imaginación en la torre de Norfeu imaginando, con la ayuda de los más mayores, historias de piratas.
Les Gavarres. Photologístics. Arxiu Imatges PTCBG
También son ideales para todas las edades las excursiones en burro por el macizo de les Gavarres. Este animal, que también desempeña un papel muy importante a favor del mantenimiento de fincas forestales y, por lo tanto, contra el riesgo de incendio, es nuestro compañero de viaje hasta las ruinas del Mas Sala, el castañar de Llach o la fuente de los Arbres. Los más mayores van a pie, pero los menores de 10 años pueden ir montados encima del burro. Si preferís montar a caballo, podéis consultar las opciones del Club Hípic Equus Empordà de Albons o de la Hípica Begur Pony Park, por ejemplo, que planifican salidas de duración y niveles diferentes.
Y acabamos este pequeño catálogo de actividades lúdicas y educativas para los más pequeños citando una iniciativa que lleva unos años velando por la reproducción de la sepia en L’Escala y L’Estartit: el Projecte Sèpia. Al margen de dar a conocer su proyecto científico, una visita a este equipo de investigadores nos permitirá conocer, por ejemplo, qué es la pesca artesanal responsable visitando pescadores de L’Estartit.