Se accede a pie desde el final de la calle Jaume Vicens i Vives en dirección al mar. Al final de la calle arranca un tramo de escaleras de piedra bastante largo y de pendiente pronunciada que zigzaguea durante unos 5 o 10 minutos hasta llegar a la cala. Delante de esta cala se encuentra la pradera de posidonia oceánica más importante del municipio. Junto con la zona de Port Salvi, configura un entorno marítimo de gran valor natural, incluido en la red europea de espacios naturales protegidos, Red Natura 2000. Es una cala mixta donde se permite el nudismo. Durante la temporada de baño (desde principios de Semana Santa hasta finales de octubre), la cala está balizada como zona de bañistas. Por tanto, las embarcaciones no pueden acercarse a la orilla, y así se garantiza la seguridad de los nadadores y usuarios de la playa. El Ayuntamiento ha instalado 30 amarres ecológicos fuera de esta zona balizada para proteger la pradera de posidonia del fondeo con ancla y permitir la navegación popular. Los nadadores expertos en aguas abiertas pueden nadar desde esta cala hasta la playa de Sant Feliu, o hacer el recorrido inverso, ya que disponen de un canal de natación balizado con boyas que aumenta su seguridad.
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Elke Spa Hotel · Sant Feliu de Guíxols