Periodista, comunicadora, caminante curiosa, enamorada de las personas y de mi pequeño país
Abrimos la puerta de algunos de los comercios más emblemáticos de la ciudad de Girona.
Hay muchas formas de descubrir la historia de una ciudad y una de ellas es a través de su tejido comercial. Hoy damos un paseo por algunos de los establecimientos más antiguos y emblemáticos de la capital de las comarcas gerundenses.
Una de las tiendas más antiguas se encuentra en la calle dels Ciutadans, 17. Se trata de Casa Llapart, que abrió sus puertas en 1847 y continúa en manos de la misma familia. Actualmente, está especializada en almohadas, y durante décadas se ha dedicado a la fabricación de colchones. Primero eran de paja, después de lana y, más adelante, de materiales más modernos que han buscado siempre el buen descanso de los gerundenses.
En la calle de les Ballesteries llama la atención una puerta de cristal con un pasamanos metálico con la forma de la letra R que ocupa media puerta. Lo empujamos con cuidado y nos plantamos en el interior de Ramon Boix, una latonería fundada en 1882. Boix era latero y, entre otros objetos, hacía lámparas de petróleo y de aceite. La tienda sigue abierta en manos de su nieto, que también se llama Ramon Boix y que también es latero, en su caso, especializado en armaduras.
El interior de Casa Marieta, con decenas de objetos, cuadros, pinturas, vidrieras y piezas artísticas variadas, parece un museo, pero en realidad es un restaurante. Se encuentra en la plaza de la Independència y presume de ser uno de los más antiguos de Girona y de España. Lleva el nombre diminutivo y cariñoso de Maria Vinyoles, la emprendedora que lo fundó en 1892. Entre los muchísimos personajes que se han sentado a la mesa para disfrutar de una carta dedicada a la cocina tradicional catalana, se encuentra una de las parejas más fascinantes de la historia: Gala y Dalí.
El escaparate de la tienda Arxé, en la calle Nou, tiene esa capacidad mágica de trasladarte a otra época. Abrió en 1934 como tienda de moda y complementos de hombre y, por tanto, no faltaban sombreros, boinas y gorras. Desde hace 20 años, está especializada en este artículo y vende de todos los tamaños, formas y colores, tanto para hombre como para mujer. Puede decir orgullosa que es la única sombrerería de toda la ciudad.
Girona. Jordi Roca.
También es una aventura entrar en el Colmado Moriscot, una completísima tienda de estilo modernista que abrió en 1860 en la calle dels Ciutadans y donde encontrarás vinos, licores, cervezas y productos gourmet. ¡Cuántas historias esconden sus salas, cuántas referencias han pasado por las estanterías y por el escaparate de este local conocido popularmente como Cal Gelabert!
Decenas, cientos, miles de objetos ha vendido la casa Boué desde que una familia procedente de Francia que se dedicaba a afilar cuchillos, tijeras y herramientas la abrió junto al Pont de Pedra en 1890. Encontrarás todo tipo de utensilios de cocina y herramientas de trabajo y, muy especialmente, juegos de cuchillos de alta calidad. También venden y arreglan paraguas, tal y como avisa el paraguas metálico colgado en la fachada desde hace muchos años como reclamo.
«Nuestra obsesión son los aromas que desprenden el pan, la bollería y la pastelería». Lo dicen los profesionales de Antiga Casa Bellsolà, otro comercio pionero de la ciudad. Desde 1892 llena de pan, pasteles, bollería y opciones saladas de calidad los capazos de los clientes. Los encontrarás por toda la ciudad y siempre detrás de la imagen de dos espigas que se cruzan en el tallo.
En este repaso por algunos de los comercios con más historia de la capital gerundense cabe citar la librería Geli, una de las más antiguas de Cataluña. Pere Geli, nacido en Llampaies, la inauguró el 19 de marzo de 1879 en los bajos de un gran local junto a la rambla de Girona y allí fue haciendo crecer el fondo de catálogo y de clientes. Hace solo unos meses han cambiado de ubicación y los encontrarás con el mismo empuje de siempre en la calle de la Argenteria, 18.