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Periodista cultural
La Costa Brava, en verano, además de sol y playa es también cultura, una afirmación que se sustenta gracias a su rico y variado patrimonio arquitectónico y artístico, pero también gracias a su dinamismo en la organización de actividades de alto nivel cultural, que se refleja en el gran número de festivales de música que se celebran.
En este post presentamos algunos de los festivales que tienen más solera de la demarcación y que se celebran en Sant Feliu de Guíxols, Peralada, Torroella de Montgrí, Calella de Palafrugell y Port de la Selva, respectivamente. Nos estamos refiriendo al decano de la demarcación y uno de los más antiguos del Estado, el Festival de la Porta Ferrada de Sant Feliu de Guíxols, que supera las sesenta ediciones, al Festival Internacional de Música Castell de Peralada, al Festival de Música de Torroella de Montgrí, al Festival del Cap Roig y al Festival de Música de Sant Pere de Rodes. La excelencia en cada uno de sus ámbitos es la característica común de estos cinco ciclos, que a lo largo de su historia han traído a las comarcas gironines a verdaderas figuras de talla internacional de diversos ámbitos artísticos.
Un instante de un espectáculo de danza en el auditorio del Castell de Peralada. Foto: Toti Ferrer. Archivo Imágenes Castell de Peralada.
El marco en el que se celebra, un majestuoso conjunto medieval, es el rasgo más característico del Festival Castell de Peralada, un ciclo especializado en lírica, música clásica y danza que se celebra habitualmente desde mediados de julio a mediados de agosto. El castillo y sus jardines, la iglesia del Carme y el claustro forman un conjunto inigualable que ha sido testigo de actuaciones memorables de primeras figuras mundiales de los ámbitos en los que se ha especializado el festival.
La nómina de artistas que han pasado por Peralada es ingente. En el campo de la lírica han actuado, varias veces, Montserrat Caballé -una figura clave en el nacimiento del certamen-, Josep Carreras, Sondra Radvanovsky, Carlos Alvarez, Jonas Kaufmann, Diana Damrau, Xavier Sabata, Sonia Yontcheva, Ermonela Jaho o Barbara Hendricks. Por lo que se refiere a la música clásica, Peralada ha contado con los mejores directores de orquesta del mundo, como Lorin Maazel, Gustavo Dudamel, Daniel Barenboim o Valeri Gergiev y sus respectivas formaciones orquestales. Ángel Corella, Carlos Acosta, Tamara Rojo y el English National Ballet, Béjart Ballet Lausane o la inolvidable Sylvie Guillem son sólo algunas de las figuras que han desfilado por el auditorio de los jardines del castillo. A esto hay que añadir grandes estrellas de la música popular estatal e internacional y actores y actrices del renombre de John Malkovic, Juliette Binoche, Gerard Depardieu o Monica Bellucci.
El festival fue fundado en 1987 y es considerado una de las grandes manifestaciones culturales del verano en el Estado, con eco internacional. Aparte de ejercer una gran atracción sobre el público del Principado, el festival cuenta con una gran parte de público proveniente de la Catalunya Nord. Es incuestionable, también, la vocación internacional del festival, su contribución activa a la cultura y a la difusión musical y su carácter de motor de creación, puesto que apuesta por hacer producción propia, apoyando a nuevos creadores y compositores. Hay que añadir al atractivo del festival la posibilidad de gozar de una experiencia gastronómica memorable en el restaurante del castillo de la mano del chef Paco Pérez.
Un instante de un concierto de los Stay Homas en el Guíxols Arena del Festival de la Porta Ferrada, en Sant Feliu de Guíxols. Foto: J. Renart. Archivo Imágenes PTCBG.
Se celebra en Sant Feliu de Guíxols los meses de julio y agosto, es el festival decano de la Costa Brava y del país, con más de 60 ediciones y no está especializado en ningún género concreto, aunque tradicionalmente su programación es de un carácter bastante ecléctico, siempre moviéndose últimamente en el campo de la música popular. El festival ha pasado por varias etapas, algunas en las que había incluido un gran número de espectáculos teatrales, de danza y música clásica, combinados con conciertos de grandes figuras nacionales e internacionales, tendencia que con el tiempo ha ido variando, durante una época cerró el abanico de géneros y ahora ha recuperado alguno y tiene el foco puesto en artistas y formaciones de la música popular (pop, rock, R’n’B, electrónica, cantautor…) que son primeras figuras nacionales o internacionales .
El Festival de la Porta Ferrada ha ido cambiando de escenario principal y desde la plaza del Monestir fue a parar al puerto y, posteriormente, al Guíxols Arena, siempre buscando mejorar la comodidad del espectador. En el emplazamiento actual, uno de los ases del ciclo es un amplísimo village que ofrece al público un gran abanico de opciones gastronómicas para completar la experiencia. Sin embargo, no abandonó del todo algunos espacios como el del Puerto, que ha recuperado protagonismo.
El festival ampurdanés, que es de iniciativa pública, actualmente es sin duda el más extenso del verano -comienza a primeros de julio y termina el segundo tercio de agosto-, con más de cuarenta actuaciones. Los escenarios en los que discurre todo son diversos, en función del tipo de espectáculo que esté programado. Así, el escenario central, el mayor, es el Guíxols Arena, en la Zona Deportiva, pero también se podrá asistir a espectáculos en el Puerto, en el jardín de la Casa Trachsler (íntimos), en la iglesia del Monasterio (lírica y clásica), en Las Vegas (monólogos y cantautor en pequeño formato) y el Teatro Auditorio Narcís Masferrer (humor). Forma parte del festival, desde hace unos años, el ciclo humorístico Salat, un minifestival dentro del de la Porta Ferrada que trae a Sant Feliu a los mejores monologuistas de humor del país y también figuras del humor internacional, como Les Luthiers .
Un instante del espectáculo Banchetto Musicale del Festival de Torroella de Montgrí. Foto: Martí Artalejo.
El Festival de Torroella es uno de los más consolidados del país y tiene como particularidad que nació de la sociedad civil en 1981, consiguiendo muy pronto el apoyo incondicional de las administraciones gracias al rigor con el que trabajan. Se celebra durante los últimos días del mes de julio y gran parte del mes de agosto, está especializado en música clásica, sin renunciar a otros géneros en ocasiones, como la lírica, y lo organiza Joventuts Musicals de Torroella de Montgrí. Este ciclo tiene en común con el Festival de Peralada un criterio excelso en cuanto a la programación, por lo que pasan por el Espai Ter, actualmente su escenario principal desde que dejó la iglesia gótica de Sant Genís, verdaderas figuras internacionales de la música clásica.
Más de 40 ediciones y más de un millar largo de conciertos y espectáculos es parte del bagaje en cifras de este festival, que actualmente consta de dos complementos perfectos, el Jazz l’Estartit Festival (2014) y el Fringe Torroella-l’ Estartit. Por el festival torroellense han pasado figuras como Joaquín Achúcarro -pianista habitual del festival-, Maria João Pires, Arcadi Volodos, Elisabeth Leonskaja, Alexei Volodin, Yehudi Menuhin, Renaud y Gautier Capuçon, Lluís Claret, Jaume Aragall, Victoria dels Àngels, Barbara Hendricks, Teresa Berganza, Philippe Jarousky; las filarmónicas de Minsk, Riga o Tallin, la OBC, las formaciones de cámara Franz Liszt de Budapest, Virtuosis di Roma, I Solisti Italiani, Solistas de Viena; grandes formaciones de música antigua, coros y grupos corales de altísimo nivel e intérpretes que forman parte del ámbito llamado músicas del mundo, figuras internacionales como Ravi Shankar, Oumou Sangaré, Cristina Branco, Sabina Yannatou, Miquel Gil o Ute Lemper, entre otros.
Cursos de perfeccionamiento, conciertos de alumnos, talleres, promoción de talento joven, clases magistrales… Durante veinte días, el festival convierte Torroella de Montgrí en el epicentro de la música clásica del sur de Europa. El Espai Ter, el Museo del Mediterráneo, la iglesia de Sant Genís, el Palau Solterra, el Cine Montgrí y el Paseo del Molinet de l’Estartit son los escenarios en los que se desarrolla actualmente el festival.
Vista del interior de Sant Pere de Rodes, en un instante de un recital de piano del festival. Foto: X. Gasull. Archivo Imágenes PTCBG.
Se trata del festival más “joven” del que hablaremos, puesto que nació casi con el siglo XXI. Los pianistas Carles Lama y Sofia Cabruja (Opus Artis) son los responsables de la programación artística desde su inicio, con la complicidad del Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya. El Festival de Música de Sant Pere de Rodes está dedicado al piano y a la música de cámara y uno de sus principales atractivos es, sin duda, el lugar que lo acoge, el monasterio de Sant Pere de Rodes, un monumento espléndido situado en la sierra de Verdera. Sin embargo, el festival no es ajeno a la localidad que lo acoge y también prevé organizar una o dos veladas en el espacio del puerto del municipio al que pertenece el monasterio, Port de la Selva, que suelen ser conciertos de música coral o popular, sin descartar, sin embargo, la clásica.
Este ciclo ha conseguido consolidarse, sin estridencia alguna, trabajando con mucho rigor y aumentando gradualmente la calidad de su programación, hasta el punto de que es una de las propuestas artísticas ineludibles para los melómanos durante el verano, desde mediados de julio a finales de agosto, habiendo logrado fidelizar a un público numeroso. El festival también ha sido motor de creación, impulsando producciones propias y ha dado cabida a nuevos compositores, ya sea encargando obras originales, adaptaciones o transcripciones para diversas formaciones, que han sido estrenadas en el monasterio.
La experiencia es completa si decidís iniciar la visita al monasterio románico unas horas antes, ya que además de disfrutar de uno de los conjuntos monumentales más bonitos de nuestro país, podréis visitar también el castillo de Verdera y el poblado de Santa Creu de Rodes . El monasterio de Sant Pere, en su momento de auge entre los siglos XII y XIV, se convirtió en el más importante del condado de Empúries, por el papel relevante de sus abades y por ser un centro de peregrinaje relevante gracias a las reliquias que custodiaba. Otro de los valores que complementa los conciertos del ciclo es la posibilidad de cenar en el mismo monasterio al final del espectáculo, redondeando una jornada memorable.
Una vista aérea del castillo del Cap Roig, los jardines y el auditorio. Foto: Archivo Imágenes Clipper's Music.
El conjunto de los jardines, del castillo, de la oferta gastronómica y del entorno, todo lo que sería el envoltorio, juega a favor de una propuesta como la del Festival del Cap Roig de Calella de Palafrugell, que es posiblemente el festival con mayor proyección internacional de la demarcación en cuanto a las grandes estrellas del mundo de la música. Todo empezó con el Festival de Jazz de la Costa Brava, del que se hizo cargo Caixa de Girona y en 2001 se celebró la primera edición de lo que hoy conocemos como Festival del Cap Roig, con la instalación de un auditorio en los jardines. El castillo del Cap Roig es el centro neurálgico del jardín botánico, un proyecto impulsado por la pareja formada por el diplomático ruso Nicolau Woevodski y la aristócrata inglesa Dorothy Webster, que contaron con la ayuda de Caixa de Girona, que fue organizadora y patrocinadora del festival.
Actualmente, el organizador es Clipper’s Music Group y el patrocinio es de la Caixa, propietario del castillo y los jardines. El fulgor de las estrellas que han formado parte históricamente del programa ha sido una de los señas de identidad del festival desde su inicio. En las primeras ediciones el abanico de lenguajes artísticos del festival era algo más amplio y había incluido teatro, danza, música clásica y lírica, pero poco a poco, con el paso del tiempo, la aparición de estos géneros se ha convertido en eventual en algunos casos. Cada año la programación de Cap Roig es una apuesta segura, por la popularidad y por la consistencia artística de los artistas que pasan por el escenario del auditorio del castillo.
Caetano Veloso, Georges Moustaki, Sara Baras, Rafael Amargo, Josep Carreras, Lluís Llach, Cesária Évora, Diana Ross, Woody Allen, Paco de Lucía, Noa, Madredeus, Maceo Parker, Bob Dylan, Dionne Warwick, George Benson, Diana Krall, Roberta Flack, Tamara Rojo, Liza Minnelli, Julio Iglesias, Franco Battiato, Omara Portuondo, UB40, Michael Bolton, Jamie Cullum, Sting, Rod Stewart, BB King, Tony Bennett, Mark Knopfler o Status Quo, entre otros, han pasado por el Festival del Cap Roig. Éste es el calibre habitual de la programación del festival, que tiene como complemento perfecto la experiencia gastronómica que supone disfrutar de la cocina de los hermanos Torres, que son los responsables del restaurante del castillo. Un día de playa, una visita a los jardines, disfrutar del village o del restaurante y un gran concierto puede ser una experiencia memorable.
