Experiencias inolvidables de la DO Empo

Hay actividades para realizar durante el día, por la tarde o por la noche. Muchas son indicadas para toda la familia; otras, para gozarlas en pareja o con amigos. En este artículo, realizamos una selección muy variada y original para que el visitante conozca esta tierra que elabora vino con el corazón y una experiencia milenaria.

Visitas teatralizadas. En el Celler Cooperatiu d’Espolla, en el Alt Empordà, llevan tiempo organizando deliciosos desayunos de tramontana entre viñedos y esta es una posibilidad combinable con otra muy amena: una visita teatralizada. Es gracias a una vecina del pueblo que conoce muy bien la bodega, la señora Maria, que nos adentramos en la historia, las instalaciones, el proceso de elaboración del vino y un puñado de anécdotas reales. La cata de vino está asegurada, por supuesto.

Música y vino, ¡maestro! En los últimos años han proliferado aquí y allá festivales de música. Todo un lujo al alcance de amigos, conocidos y saludados de Mas Geli de Pals, en el Baix Empordà, por ejemplo. Esta pequeña bodega está ubicada en una terraza natural con vistas al Montgrí y al Canigó y vive unas maravillosas puestas de sol a diario. Y es justo aquí y en este momento del día cuando la magia se despliega y pueden catarse bocaditos de kilómetro 0, brindar con grandes vinos ecológicos y escuchar a grandes voces del momento en un ambiente íntimo.

Catas al lado del mar. La uva nace en unas vides bien arraigadas, sí, pero también empapadas de brisa mediterránea. Y catar un vino al lado del mar, incluso navegando en un laúd tradicional, es una experiencia redonda, un privilegio para todos los sentidos. Las organizan varias bodegas, entre ellas la bodega Perelada, con más de seiscientos años de tradición vinícola, y la bodega Empordàlia.

Noches bajo las estrellas. Esta es una propuesta de la bodega *lavinyeta que nos acerca a vinos extraordinarios y, al mismo tiempo, al precioso cielo del Empordà. Todo empieza con un paseo entre las vides y los olivares de la bodega, en Masarac (Alt Empordà), sigue con una cena relajada bajo esa tenue luz que despide el día y se cierra con una charla del colectivo Astronomia des de l’Empordà llena de curiosidades sobre el sistema solar. ¡Un plan estelar!

Despertarse entre viñedos. Las estrellas nos han abierto las puertas de la noche y han alimentado el deseo de un descanso intenso y especial. En el Baix Empordà es posible dormir entre viñedos en un rincón de las Gavarres, de belleza magnética: las habitaciones de la Finca Bell-lloc de la bodega Brugarol. En el Alt Empordà, podemos elegir las elegantes suites de la bodega Masia Serra en Cantallops, donde, además, puede realizarse una cata gourmet de vino y aceite maridada con quesos y embutidos artesanos. Otro alojamiento rural que hay que tener en cuenta es el de la bodega Martín Faixó: porque ofrece una cálida y rústica acogida y porque, desde aquí arriba, en Perafita, en medio del cabo de Creus, se está más cerca de Dioniso, el dios griego del vino y la vid.