Experiencias entre viñas de interior

Rompe con la rutina y empieza una nueva etapa muy activa y llena de energía, combinando deporte, cultura, naturaleza, enología y gastronomía. La DO Empordà mezcla tradición e innovación, con muchas bodegas que experimentan con técnicas nuevas sin perder la esencia de su legado vinícola. Una zona conocida por sus vinos con carácter único, que reflejan la influencia de su geografía especial y el clima mediterráneo con toques de tramontana, un viento fuerte del norte que ayuda a mantener las viñas saludables. Vinos tintos robustos y aromáticos, vinos blancos frescos y ligeros, rosados florales o incluso vinos dulces naturales, despiertan las emociones de los paladares más exigentes. ¿Y si a la experiencia de la cata le sumas otras para abrazar la naturaleza o jugar con ella, siempre respetándola? A continuación, te damos unas cuántas ideas para convertirte en un auténtico “viñalover” de interior.

Andando, en “burricleta”, bicicleta eléctrica o segway, si quieres ir de bodega en bodega disfrutando del paisaje y respetando la naturaleza, acércate en Gualta, donde está el Centro de Burricleta del Baix Empordà. Ya sea solos o en familia, con amigos o con el trabajo, los caminos entre viñas pueden convertirse en un inmenso tablero de juego.

Pero si en lugar de pedalear eres más de dejar abandonados los cabellos al viento y el cuerpo al trotar de los caballos, con Empordàlia podrás subirte a su lomo y disfrutar de una ruta entre viñas y olivos, en un entorno natural y rural incomparable.

Si alguien sabe de winelovers es Masia Serra, una bodega situada en el pequeño pueblo de Cantallops, justo en el corazón del Empordà. Es fruto de una tradición familiar que emerge con fuerza en 1996. La pasión, el esfuerzo, y el aprecio en la tierra, han hecho crecer la bodega, convirtiéndola en un claro en lo referente de la zona. Paseando por las viñas, conocerás cuáles son las raíces de Jaume y Sílvia, su historia, su filosofía de vida, y sus sueños de futuro. Y tú también podrás tener una noche de sueño entre viñas.

También podrás despertar y hacer un picnic entre viñas en la bodega La Vinyeta, en Mollet de Peralada (Alt Empordà), recientemente premiados por su tarea en favor del medio ambiente. Tienen unos apartamentos ideales, donde podrás descansar tras descubrir sus viñas y olivos, así como su historia, y probar sus vinos maridados con quesos elaborados en su propia quesería.

Una experiencia enoromántica, que también podrás descubrir en Grup Oliveda, situado en Capmany. No te pierdas el paseo por las viñas de Finca Furot situadas en Vilamaniscle, ni su desayuno megalítico en el viñedo del Dolmen, un picnic de productos locales en plena naturaleza, con vistas espectaculares al Empordà y un recorrido aproximado de 3,5km.

Y si también eres lover de la biodiversidad, tendrás que descubrir la Vi-o-diversidad de la bodega Mas Lunas, con más de 700 años de tradición vitivinícola familiar. Situados en Garriguella, al pie del paraje natural de la Albera, elaboran sus vinos siguiendo una producción ecológica en 80 hectáreas de viñedos propios y priorizando las variedades tradicionales del Empordà, Garnacha y Cariñena. Descubre sus viñas ecológicas en una ruta a pie por el Paraje Natural de la Sierra de la Albera y conoce el proyecto de recuperación de la biodiversidad y sensibilización ambiental de esta finca.

Todo el mundo que sueña con una sensación de bienestar 100% tiene que probar la actividad de winefulness que propone Edgar Tarrés, a través de unas dinámicas entre viñedos para despertar los sentidos y la sensibilidad a través de la naturaleza. Una vivencia pensada para mejorar la salud y el bienestar a partir de una cata de vino consciente, que utiliza técnicas de mindfulness, sonidos de cuencos tibetanos y la propia naturaleza, para que puedas disfrutarla en pareja o con un grupo de amigos.

Y para poner fin a la ruta y descansar, nada mejor que Mas Martí, una masía llena de rincones y rodeada de viñedos, bodegas, olivos y alcornoques, donde naturaleza y ecología van de la mano, también en la cocina, para ofrecerte una experiencia que solo te puede dejar in love.

Como bien dice la sumiller Laura Masramon, “si la comunicación es la clave de la felicidad, el vino es la cerradura”. Por eso Masramon te ayuda a abrir esta cerradura con talleres personalizados, catas de aceite de oliva y maridajes de vinos y quesos artesanos, entre otros, que te acercarán mucho a conseguir la felicidad que te permite respirar para seguir adelante.