Periodista cultural
Existen 4 espacios que se han inaugurado recientemente en las comarcas gironines y que vale la pena visitar. Se trata del Centro de Interpretación de los Indianos de Begur, de la casa natal de Salvador Dalí en Figueres, del Castillo de Lloret y del Espacio Cráter de Olot, el más "veterano" (marzo de 2022).
El legado de los «americanos», los primeros años y la vida y obra del pintor altoampurdanés, la sostenibilidad y la crisis climática y la vulcanología son los objetos de atención de estos proyectos innovadores y de gran sofisticación tecnológica.
La emigración de muchos begurenses a la isla de Cuba a lo largo del siglo XIX en busca de fortuna y su posterior regreso a casa hacen que en la localidad bajo-ampurdanesa se pueda seguir la huella de los llamados indianos, una huella de alto valor en aspectos como el económico, el social, el cultural y sobre todo el arquitectónico. Los indianos o “americanos”, que habían prosperado con sus negocios, construían sus casas de acuerdo a su nueva condición de gente acomodada y con una fuerte influencia del estilo de vida de Cuba, lo que otorgó un nuevo aspecto a la villa. La influencia de los indianos ha sido tan profunda e importante, que el Área de Cultura del Ayuntamiento de Begur ha impulsado un nuevo espacio museográfico, que sitúa a la localidad como la capital de los indianos de Cataluña. El nuevo Centro de Interpretación de los Indianos de Catalunya-Begur está situado en las Escoles Velles Centro Cultural y se inauguró el mes de febrero de este año.
Una vista de una de las salas del Centro de Interpretación de los Indianos. Foto: Visit Begur.
El Centro de Interpretación de los Indianos de Catalunya-Begur tiene como objetivo preservar, difundir, investigar y divulgar el hecho indiano en nuestro país. El centro es un equipamiento abierto a todo el público y dedicado a la educación, conservación y estudio del patrimonio heredado de las generaciones pasadas. Trata de potenciar la cultura local, fomentar la cultura en el ámbito educativo y escolar y tratará de potenciar el trabajo en red con el resto de municipios indianos. El centro se estructura en cinco ámbitos acompañados de un espacio para el desarrollo de las distintas actividades asociadas o no con el proyecto. El discurso museográfico combina diferentes recursos, que hacen que la experiencia del espectador sea lúdica y entretenida, además de ilustrativa y didáctica.
El nuevo equipamiento pretende ser un espacio atractivo y adecuado para cualquier público, para los escolares, para gente de todas las edades y también quiere convertirse en un reclamo para el turismo local o foráneo, por eso hay instaladas escenografías que trasladan a los visitantes a los espacios y atmósferas de la época, como barcos transatlánticos o a los interiores de las casas indianas, con recursos tecnológicos como el muro interactivo o el Smart Mirror. El centro dispone de una sala inmersiva que permite a los visitantes revivir qué pasaba en lo alto del barco en el viaje a las Américas y cuenta con pantallas donde se reproducen archivos de vídeo como complemento del material gráfico. La idea es estimular los diferentes sentidos del espectador, como el oído, a través de la reproducción de música tradicional de la época y habaneras, o el olfato, gracias a la instalación de un mueble que permite al espectador oler diferentes productos que se importaron de las Américas, como el café, el cacao o el tabaco. El nuevo centro cuenta además con un espacio anexo polivalente, la Sala BacanArt, que acogerá a lo largo del año exposiciones temporales de arte, presentaciones o charlas temáticas.
La entrada del Centro de Interpretación de los Indianos. Foto: Visit Begur.
El número 6 de la calle Monturiol de Figueres, la casa natal del pintor Salvador Dalí, se añadirá en breve al triángulo daliniano, formado por el Teatro-Museo Salvador Dalí, el castillo de Púbol y la casa de Portlligat (Cadaqués). Concretamente el mes de julio está previsto que el visitante pueda realizar un viaje inmersivo a través de la vida y el legado artístico de Dalí, que nació en mayo de 1904 en el entresuelo del edificio que ahora se ha museizado y en cuyos bajos su padre, que ejercía de notario, había alquilado y establecido su despacho. Desde 1995, el Ayuntamiento de Figueres ha ido adquiriendo varios espacios del edificio donde Dalí vivió los primeros 7 años de su vida, hasta trasladarse con su familia a un inmueble situado no muy lejos, en la plaza de la Palmera, que también es visitable. Primero la notaría en los bajos, después parte del entresuelo y así de forma sucesiva, hasta disponer de todo el edificio, del que en la primera decena de siglo se restauró la fachada, el consistorio está a punto de llegar a punto culminante del proceso: abrirla al público.
El recorrido será totalmente inmersivo y el visitante dispondrá de una audio-guía que se sincronizará con las imágenes que se proyecten en las paredes de las estancias de la casa. El viaje comienza en los bajos, en la notaría y seguirá en el entresuelo, donde la habitación del artista todavía conserva la pintura original, el dibujo de una figura femenina y un grabado con cenefas. En este piso, además, los visitantes podrán conocer quiénes eran el resto de miembros de la familia y la relación que mantuvieron con el pintor, teniendo especial relevancia la figura del padre del artista. Durante el recorrido inmersivo se oye la voz de Dalí y otros sonidos o músicas, o efectos de luz que complementan los mappings y las proyecciones. También se hace referencia en la audioguía a los amigos de Dalí en el instituto, como el arquitecto, pintor y pedagogo Ramon Reig o el pintor Marià Baig.
Recreación digital de una de las salas inmersivas en la casa natal de Salvador Dalí, DOLLAR.
El Castell d’en Plaja, un verdadero icono turístico de Lloret de Mar, tiene como objetivo convertirse en un centro en el que los visitantes puedan vivir una experiencia inmersiva y multisensorial relacionada con la sostenibilidad y el cambio climático. Gustavo Buesa, propietario del castillo, decidió que éste fuera el uso del edificio, que ha sido rehabilitado y que abrió sus puertas al público en abril de este año. Situado justo delante del poblado ibérico del Turó Rodó y al pie de Sa Caleta y del camino de ronda, los trabajos de rehabilitación han sido complejos y la sostenibilidad también ha sido uno de los ejes vertebradores del proyecto constructivo, por lo que gran parte del electricidad consumida ha provenido de fuentes no contaminantes, que tendrán continuidad. El proyecto prevé que el Castillo de Lloret, como desean que se conozca a partir de su entrada en funcionamiento, se convierta en un espacio pedagógico, pero también que muestre a los visitantes las diversas soluciones que tenemos a nuestro alcance.
El viaje que el Castillo de Lloret ofrece a los visitantes un recorrido, también pensado para acoger a alumnos de escuelas e institutos que está hecho a medida, con 3 etapas. En la Sala Causas, el visitante entrará en un territorio inexplorado a través del metaverso, donde se exponen las actividades humanas que han contaminado el planeta y han provocado el calentamiento global. En la Sala Consecuencias, el visitante vivirá los efectos de la crisis climática, como la deforestación del Amazonas, el impacto de un incendio de sexta generación, la contaminación de los océanos o el naufragio en una tormenta de grandes dimensiones. La experiencia será inmersiva, puesto que la tecnología lo permite, con una pantalla LED de 12 metros de ancho, una plataforma que se mueve y vibra al ritmo de las imágenes y todo tipo de efectos sensoriales, sonoros, lumínicos y térmicos. La Sala Soluciones ofrece las claves para detener la crisis climática también de forma multisensorial, a través de un espectáculo de imagen, luz y sonido y diferentes juegos digitales interactivos. La experiencia conjunta ha sido bautizada como Still on time. An immersive climate experience (Aún hay tiempo. Una experiencia climática inmersiva).
En la terraza exterior, con servicio de bar y unas vistas sensacionales, se han instalado árboles metálicos, equipados con placas fotovoltaicas que protegen del sol de día y la iluminan por la noche. Además, durante el verano (desde junio a agosto), sobre la fachada del castillo se proyectará cada noche un espectáculo de luces y colores, que se verá desde Sa Caleta y desde parte de la playa de Lloret . La previsión es que el Castell de Lloret acoja 100.000 visitantes al año.
Una vista del Castell de Lloret. Foto: Rafa Perez. Arxiu Imatges PTCBG
Inaugurado de forma relativamente reciente, el Espai Cràter se ha convertido en uno de los numerosos polos de atracción de visitantes de Olot. No es un museo, es un centro de interpretación y conocimiento del vulcanismo que promueve el conocimiento en torno a los volcanes, la ciencia y la sociedad. Se trata de una muestra absolutamente interactiva, que juega a fondo la tecnología, con audiovisuales, experiencias inmersivas, realidad aumentada, gamificación y videomapaje. Como dicen sus responsables para promocionarlo, el Espai Cràter “permite aprender sobre volcanes desde el interior de un volcán: ¡una experiencia única!” La exposición permanente, que comprende diversos lenguajes expositivos, está estructurada en diversos ámbitos que tratan de explicar los volcanes de la Garrotxa y del mundo, así como la particular relación que mantienen con su entorno. La muestra incluye una maqueta de 15 m2 que explica la formación de la Garrotxa, con propuestas de ludificación y otras sorpresas. La sala la domina un gran talud de greda que nos permite ver las entrañas del volcán del Puig del Roser, que es donde está ubicada la sala, literalmente dentro un volcán. El programa de visitas incluye algunas comentadas en la exposición y también en el volcán Montsacopa.
El equipamiento olotense está abierto a las personas y colectivos de la ciudad, es parte activa de su desarrollo y dispone de una propuesta educativa inclusiva y de valor. Aparte, también es un espacio científico referente nacional e internacional y ha diseñado una programación con un gran abanico de propuestas que van desde las exposiciones a los talleres, pasando por audiovisuales y debates, mesas redondas o conferencias, fomentando la participación de la ciudadanía y los visitantes. La forma de trabajar del Espai Cràter apela siempre a la innovación, la experimentación y la participación “para abordar los retos globales que afectan a un nivel local”. El equipamiento está activo durante todo el año, os recomiendo vivamente la visita!
Una imagen de una visita al Espai Cràter de Olot. Juan Divi. Archivo Imágenes PTCBG