Blog
Periodista y creador de contenidos. Especializado en turismo y deportes.
El turismo rural es una de las modalidades de vacaciones que más ha evolucionado en los últimos años y cuenta con un abanico de infinitas posibilidades, que se adaptan siempre a las preferencias de sus huéspedes.
Y es que el turismo rural es una opción de alojamiento ideal para quienes quieren estar más cerca de la naturaleza y es también el punto de partida para la práctica del turismo activo, desconectando de la rutina y poniendo a vuestro alcance experiencias, actividades deportivas y planes poco habituales, siempre en contacto con el medio rural y natural. Éste es el gran aliciente, y por eso multitud de casas repartidas por toda la geografía se han adaptado para ofrecer esta fórmula con tan calidez, integrándose en un modelo turístico genuino al servicio de familias, parejas, grupos de amigos y colectivos.
Una casa rural en el Alt Empordà. Foto: Esperanza Riera
Todos ellos comparten el deseo de desconectar en una atmósfera ideal que os abre la puerta para aprovechar al máximo vuestra estancia en el Pirineo de Girona o la Costa Brava, en unos establecimientos en los que os sentiréis mejor que en casa y donde encontraréis todos los servicios personalizados para practicar deportes y actividades de naturaleza.
Turismo rural es sinónimo de calidad y autenticidad, y aparte de un montón de casas rehabilitadas con encanto, escondidas en los mil y un rincones que tenéis que explorar, hay algunas que unifican esfuerzos para llegar a su público final de forma conjunta . Es el caso de La Asociación de casas Turismo Rural Girona – Costa Brava – Pirineu, que agrupa a más de 240 establecimientos que garantizan una experiencia de calidad basada en la autenticidad y la aproximación a la vida rural tradicional, preservando un alto nivel de confort y ofreciendo un gran catálogo de servicios.
Mas Garganta, en la Vall d'en Bas (Garrotxa). Archivo de imágenes PTCBG
Encontraréis establecimientos en la Garrotxa, Ripollès, Cerdanya, Pla de l’Estany, Gironès, La Selva, Alt Empordà y Baix Empordà, una gran variedad de masías rurales con actividades de agroturismo y casas rurales restauradas con mucho encanto. Todo un abanico de posibilidades para disfrutar en familia y desconectar en plena naturaleza, con diferentes modalidades de alquiler de la casa completa o por habitaciones, con todas las fórmulas de pensión y rodeadas de naturaleza, con el respeto por el medio ambiente como forma de entender la vida.
Turisme rural en el Ripollès. Foto: Maria Geli y Pilar Planagumà, Archivo de imágenes PTCBG
