Separada de la playa de Sant Antoni por el arroyo, el nombre de la playa tiene un origen claro. Lo debe a la torre Valentina, una construcción edificada en el siglo XVI con el objetivo de poder prever con mayor antelación los ataques piratas. Se puede acceder a la playa siguiendo el paseo y el camino de ronda. De entorno claramente urbano, dispone de la mayoría de servicios de los que también dispone la playa vecina, inclusive el servicio de sillas anfibias para facilitar el baño a las personas con movilidad reducida. También ha sido reconocida con la bandera azul. La playa de Torre Valentina cuenta con una longitud de 660 metros y es de arena fina.
A destacar: el nombre de la playa proviene de la torre de vigía construida en el siglo XVI y que todavía se conserva
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