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La Costa Brava y el Pirineo de Girona es un destino conocido y reconocido por la calidad de sus campos de golf, por el trabajo de mejora constante de estos espacios y por la excelencia del juego, los servicios y el entorno.
Algunos aspectos menos conocidos, pero muy importantes teniendo en cuenta la actual crisis climática, son los estudios e inversiones que estos espacios realizan para mejorar la eficiencia en el uso de los recursos, incrementar la biodiversidad y proteger el entorno.
Cuando nos imaginamos un campo de golf, se nos viene a la mente un espacio verde, con algún que otro árbol y arbusto y con zonas, los greens, de una hierba cortada de manera impecable donde se desarrolla el juego. Este verdor requiere agua y, en un país en el que la lluvia escasea, es necesario buscar soluciones para una gestión mucho más eficiente de este recurso. Así, el agua que se utiliza para regar los campos de golf es agua regenerada, no potable, que proviene directamente de una depuradora.
Por otra parte, el golf tiene una relación única con el medio natural, ya que, por su propia naturaleza, requiere de un entorno sin cemento ni edificios y con árboles y espacios naturales o naturalizados. Estos espacios, por lo tanto, atraen y albergan una gran multitud de vida salvaje (pájaros, mamíferos, invertebrados, etc.).
Camiral Golf & Wellness Golf PGA. Harold Abellan. Arxiu Imatges. PTCBG.
Así, si partimos de la premisa de que tenemos unos campos de golf que utilizan agua regenerada y que desarrollan prácticas agronómicas sostenibles (plantas autóctonas, bajo o cero uso de productos químicos para fertilizar, bajo o cero uso de insecticidas, etc.), estamos hablando de espacios que contribuyen a la buena calidad del entorno y que ayudan a aumentar la biodiversidad.
Además, aparte de los beneficios medioambientales, el golf repercute también en la salud y el bienestar de quienes lo practican, ya que es un deporte apto para personas de diferentes edades. Las personas que lo practican tienen la oportunidad de estar al aire libre y caminar en un entorno natural en el que se escuchan los pájaros y las hojas de los árboles y en el que grupos de jugadores se reúnen y socializan de forma desenfadada.
Los campos de golf de la Costa Brava y el Pirineo de Girona trabajan para optimizar los recursos, ser más eficientes en el uso del agua y la energía, y generar espacios saludables y biodiversos. Se trata de un camino lleno de retos en el que todavía queda trabajo por hacer. No obstante, queremos contaros algunas de las buenas prácticas y buenos ejemplos que se están llevando a cabo y que van en esta dirección:
En 2023, el Camiral Golf & Wellness ha sido reconocido por la lista de Green 100 (elaborada por Golf World y GEO Foundation), que identifica a los campos de golf más conscientes y socialmente responsables con el medio ambiente en Europa. Todo el espacio se gestiona como una reserva natural y hay un biólogo residente que supervisa la salud de la población de fauna y flora autóctonas. El riego del campo y los jardines se hace con agua regenerada y, además, se han instalado placas solares en el hotel Camiral para disponer de energía renovable.
El Golf de Pals dispone de cortacéspedes eléctricos autónomos que ayudan a reducir en un 50 % el consumo de combustibles fósiles y, por lo tanto, reducen la emisión de gases de efecto invernadero. También han renovado el sistema de riego y han reducido las zonas de hierba, consiguiendo un ahorro de agua y energía gracias a un menor consumo de las bombas del sistema de riego. Asimismo, utilizan compost propio hecho con los residuos vegetales, de tal manera que se reduce el uso de fertilizantes inorgánicos.
Golf de Pals. Harold Abellan. Arxiu Imatges. PTCBG.
Golf d’Aro – Mas Nou
El Golf d’Aro – Mas Nou trabaja para incrementar la biodiversidad de su espacio y, para ello, ha instalado comederos y cajas nido para pájaros, aprovechando su proximidad al espacio natural del Macizo de las Gavarres. También han comprado buggies eléctricos y aplican medidas de mejora medioambiental cada año para conservar el sello de sostenibilidad GEO.
El Empordà Golf Club está situado a menos de 10 km del Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Bajo Ter, por lo que muchas especies del parque se detienen o visitan el campo.
El Par 3 Gualta está trabajando para cambiar la variedad de hierba, así como las plantas y los árboles, por variedades autóctonas mediterráneas que consumen menos agua y son más eficientes y resistentes a la sequía. También trabajan con el Parque Natural del Montgrí, las Islas Medes y el Bajo Ter y forman parte de la Carta Europea de Turismo Sostenible (CETS).
Vemos, pues, que hay donde elegir. Así, podrás descubrir que tras la práctica del golf hay todo un mundo de gestión de recursos naturales que va mucho más allá de la imagen de campo verde de nuestro imaginario.
Golf d'Aro - Mas Nou. Harold Abellan. Arxiu Imatges. PTCBG.
