Comunicadora 'tekie' y yogui. Un ser social, entusiasta de la vida y de morro fino.
La bicicleta es uno de los inventos más útiles y sostenibles para la movilidad. Tanto si buscáis la serenidad de las calas escondidas y los pueblos costeros como la emoción de los desafíos montañosos, las dos ruedas te permiten disfrutar el doble.
Si queréis llevar a cabo una experiencia inolvidable sobre dos ruedas (o más), el cicloturismo combina el amor por el deporte y el medio ambiente, con el descubrimiento del territorio. La Costa Brava y el Pirineo de Girona, con su diversidad paisajística y cultural, se convierten en escenarios ideales para la mejor aventura ciclista sostenible. Acompañadnos en este viaje y descubrid las mejores rutas, consejos prácticos y razones por las cuales el cicloturismo es la opción perfecta para explorar estos lugares espectaculares.
Sant Pau de Segúries, Ripollès. Jase Wilson. Arxiu Consorci Vies Verdes de Girona
Vivir la bici
Cada 3 de junio, se celebra el Día Mundial de la Bicicleta, una efeméride promovida por la ONU que reivindica su importancia como medio de transporte sostenible, sencillo, asequible, fiable, limpio y ecológico, que contribuye a la gestión ambiental y beneficia la salud. Un sistema de transporte que promueve el crecimiento económico, reduce las desigualdades y refuerza la lucha contra el cambio climático, aspectos fundamentales para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
Es por eso que la bicicleta es mucho más que un medio de transporte. Es una filosofía de vida que promueve la movilidad sostenible, a la vez que beneficia la salud y nos permite momentos de recreo. En este contexto, la Costa Brava y el Pirineo de Girona ofrecen un marco incomparable para los amantes de la bicicleta. Su riqueza patrimonial, cultural y natural, configura rutas como las Vías Verdes, que permiten descubrir todos los secretos del territorio, o Pirinexus, con 340 kilómetros circulares que podéis hacer en dos, cuatro o seis días, y donde podréis conocer dos territorios con mucha historia: las comarcas gerundenses y el Vallespir. Encontraréis caminos históricos como los de la Retirada, lugares que os transportarán a la época griega y romana como las ruinas de Empúries, y ciudades emblemáticas como Girona.
Les Preses, La Garrotxa. Álvaro Sanz. Arxiu Consorci Vies Verdes de Girona
Maneras de pedalear
Para pedalear por las vías, pistas forestales y por carreteras poco transitadas como las de las Vías Verdes y Pirinexus, se aconseja usar una bicicleta híbrida de graba, trekking o similar. Una ruta ideal para hacer con alforjas. En caso de que utilicéis bicicletas eléctricas, tenéis disponibles hasta 25 puntos de carga (13 para cargar y 12 de carga y autorreparación) situados en diferentes etapas.
Sea cual sea vuestra manera de pedalear, la bicicleta también es ideal para explorar rutas culturales y naturales como el Triángulo Daliniano y los paisajes idílicos que propone Trek and Ride, del Patronato de Turismo de la Costa Brava y Pirineo de Girona. Otras iniciativas, como las de Ebikes Area o la Burricleta, ofrecen opciones de cicloturismo relajado y tranquilo, perfectos para descubrir los encantos de la región sin prisas. Por otro lado, el Centre Logístic de Bicicletes, de Olot (en la Garrotxa), ofrece un servicio integral de alquileres, traslados y logística, tanto para pequeñas excursiones como para grandes rutas, individuales y para grupos, en un territorio privilegiado.
Bescanó, Gironès. Stella Rotger. Arxiu Consorci Vies Verdes de Girona
Sabías que…
Una creencia muy extendida es que la bicicleta es un invento de Leonardo da Vinci, por unos dibujos encontrados del genio italiano. Pero lo cierto es que el primer invento de dos ruedas deL que hay pruebas fehacientes es la draisienne, inventada por el alemán Karl von Drais en 1817 y exhibida en París al año siguiente. La máquina de correr (así es como la llamó) estaba elaborada en madera y no tenía pedales.
Desde entonces la bicicleta ha ido evolucionando y ha dado lugar a multitud de pruebas por todo el mundo y a una auténtica fiebre ciclista. Desde hace unas décadas, los equipos ciclistas profesionales de todo el mundo eligen la Costa Brava y el Pirineo de Girona como sede para sus training camps. Ciclistas como Robert Gesink o exciclistas de la talla de Rory Sutherland, Marcel Kittel, Dan Martin o David Millar, entre otros muchos viven y entrenan en la zona y algunos de ellos incluso tienen sus negocios.
¡Animaos a pedalear y a descubrir lo mejor del territorio desde el asiento de vuestras bicicletas!